Al día siguiente del parto, Samantha pide al médico que le den el alta. Se quiere ir lejos con su hijo. El médico se sorprende.
--creí que eso ya estaba claro... su esposo se acaba de llevar al niño yo ya firmé el alta.
Samantha se desespera:
--¡mi hijo, me han robado a mi hijo¡
--él es el padre.
Samantha llora:
--¡¡no, no... yo no quiero que él esté con mi hijo¡
--pero usted no puede separar a un padre de su hijo.
Samantha se enfrenta al doctor:
--¡¡ese no es problema de usted¡¡¿¡dónde está mi hijo?¡
-- el señor Colby se lo acaba de llevar, la está esperando fuera.
En camisón Samantha sale del hospital, Miles la espera en la puerta. Ella está como loca. Le reclama por su hijo.
--tranquila ex gordita, tu hijo está bien pero si quieres volver a verlo vienes conmigo al registro civil, le doy mi
apellido a Miles, ponemos fecha de boda y además pones una demanda para ser una Carrington.
Samantha se hunde de dolor y dice:
--haremos lo que tú quieras pero dame a mi hijo... dame a mi hijo.
Miles sonríe victorioso.
Samantha con su hijo en brazos sale del juzgado, Miles e Elizabeth salen con ellos.
-- que bueno que entraste en razón y vas a ser las cosas como Dios manda --Elizabeth a Samantha.
Miles besa a Samantha con cinismo en la mejilla y ella disimula el asco que siente.
--Ya verás que feliz vamos a ser tu amiga y yo cuando nos casemos --Miles a Elizabeth.
Samantha se siente en las manos de Miles pero al ver la cara de su hijo se le olvida todo. Su pequeño Steve es su luz. Miles abraza a una deshecha Samantha, el malvado hombre está feliz porque todo salio como él quería
Kyle ha buscado refugio con sus amigos. Llora sobre su cama destrozado y abrazado a Dani que nunca había visto a su amigo así y no sabe qué hacer. Kyle habla roto por el dolor.
--¡¡¡tú tienes razón, no lo quería ver y me estaba enamorando de Elizabeth pero no lo quería aceptar porque me lastimaba mucho¡¡esa guarra se ha acostado con todos los hombres que conozco sólo para humillarme¡ ¡yo creí que por mi iba a cambiar y no sabes lo que fue encontrarla desnuda en brazos de mi padre.
Kyle está destrozado y atormentado.
--no te puedo decir que me sorprende porqué así son esas mujeres --dice Dani-- pero me duele verte así. Me duele que la ames. Me duele que sufras. Un hombre nunca se debería enamorar de una mujer que sólo sirve de diversión, que no respeta a los hombres. Es una puta y como tal hay que tratarla.
Kyle siente que se ahoga. No puede respirar. Tiene un nudo en la garganta y mucho dolor en su alma:
--¿y cómo le hago?¿¿¡como le hago para arrancarme todo este dolor??¡
Dani no lo suelta. Lo tiene muy abrazado y deja que llore en su hombro.
--yo jamás he amado a una mujer y no quiero hacerlo, no sé cómo te puedo ayudar.
Kyle lo mira triste:
--amar es lo más bello del mundo pero si es de la mujer correcta.
Scott está muy deprimido, no deja de pensar en Samantha. Llora sobre la cama. Esa misma cama donde fue engendrado ese bebé que acababa de nacer.
--¿Qué tiene Miles que no tenga yo? ¡Cómo me gustaría que estuviéramos juntos! ¡No, no puede ser! ¡Tú has sido suya y hasta le has dado un hijo!
Miles entra en ese momento en el cuarto y lo encuentra llorando.
--¿Qué te pasa?
-- ¡Nada que a ti te importe!
Miles se hace el simpático. El que no pasa nada.
--¡Vaya! ¡Veo que estás de mal humor! ¡Cuéntame, para eso estamos los amigos!
Scott está furioso.
--¡Tú y yo dejamos de ser amigos hace tiempo!
--¿Qué culpa tengo yo de que Samantha me haya preferido a mí? ¡Junior es el fruto de nuestro amor! ¡Yo soy un triunfador y tú no eres nada más que un fracasado!
-- ¡Seré fracasado, pero estoy pagando caro mi error! ¡Nunca debí participar en esa apuesta! --Scott.
-¡Pero participaste y ahora Samantha es mía! ¡Nos vamos a casar y seremos muy felices los tres! ¡Yo no la voy a dejar y menos ahora que tiene dinero!
Scott le empieza a pegar. Dani se mete en medio y para los golpes. Miles no se había defendido y sonríe victorioso. Scott se va llorando.
Días después...
A solas en su cama de casa de los amigos, Kyle sin camisa y con los pantalones desabrochados acaricia uno a uno todos los recuerdos bonitos que vivió con Elizabeth. Llora sangre:
--sólo querías sexo ¡¡¿porqué no te bastó mi amor?
El guapo chico llora abrazado a su almohada.
--me tragué mis celos pero no puedo aceptar que hayas estado con mi padre después de todo lo que vivimos ¿porque me hiciste esto?¿porqué?
Elizabeth y Kyle separados y sin saber que el otro sufre, seguro que esa relación que tuvieron para el otro sólo fue sexo. Mike visita a su hijo. Dani lo deja entrar. Kyle se incorpora en la cama. Seca sus lágrimas.
--¿qué haces aquí?
Mike se sienta a su lado. Trata de animarlo:
-¿porqué no hablas con ella? Ve a buscarla. Hablad de lo que os pasa.
--¿para qué?está en los brazos de otro hombre --dice Kyle atormentado por los celos.
--hijo, no se puede ser tan celoso.
--¿y cómo no serlo con una mujer que se baja las bragas ante cualquier macho? --dice llorando de rabia.
--hijo, yo la escuché muy enamorada de ti, no se ha ido a refugiar en los brazos de otro hombre... no señor. Estoy seguro que te está esperando.
Kyle se seca las lágrimas:
--ojalá así sea.
Mike acaricia a su hijo en el muslo muy paternalmente:
--yo sé que tú y esa muchacha estais hecho el uno para el otro. Me daréis lindos nietos.
--corres demasiado, papá.
--y tú eres muy lento. ¿Qué esperas a ir a buscarla? ¿Qué temes encontrarla en brazos de otro o darte cuenta que has sido injusto con ella, que en serio te ama?
Kyle escucha a su padre aturdido.
Samantha está sola con su bebé. Es Steve Colby. El hijo de su violador y ya no puede huir. Es la víspera de su boda. Le da asco, horror y terror saber que se convertirá en la esposa de ese hombre. No sabe lo que le espera viviendo con él. Confía en que reciba pronto su herencia y Miles desaparezca de sus vidas.
Mientras el novio está manejando a su lado Jessica, la hermana de Elizabeth. Ella está molesta.
--¿adónde vamos?
Él la mira con cara de degenerado.
--al motel de siempre.
--¡te dije que hoy no¡
Él guiña el ojo. Su mirada es libidinosa.
--necesitas un macho. Yo te quitaré el mal humor.
Ella está furiosa.
--¡Me prometiste mucho dinero si me convertía en tu amante y sólo me has robado mi dinero.
Él sonríe con cara de degenerado.
--Y te lo has pasado muy bien en la cama conmigo. Haz gozado como una perra
--¿y mi dinero?
--Las inversiones salieron mal, pídele más a tu hermana. Tengo un negocio que…
--para el auto. No me vas a tener ni te voy a dar dinero hasta que me devuelvas lo que te he dado¡
--cuando estés desnuda en mis brazos se te olvidará todo.
Jessica está furiosa. Es ella la que usaba a los hombres y no al revés. Agarra el volante para quitarle el control del auto y frenar.
--¡no seas loca, nos vamos a matar¡¡
Miles pierde el control del auto. Un camión se les cruza en el camino. Gritan. Se estrellan y el auto explota.
Elizabeth de negro y destrozada se despide de su hermana. No quiere pensar en nada. En que hacia en ese auto con Miles. Se queda con los buenos momentos de su infancia. Es mucho su dolor. No ha querido ceremonia. Solas ella y Samantha. Elizabeth esparce las cenizas de su hermana ante la tumba de sus padres. Samantha, de blanco, la abraza. La apoya.
--¿porque no has traído las cenizas de Miles?¿las vas a enterrar? Podemos comprar una tumba. Será un bonito recuerdo para tu hijo -Elizabeth
Samantha se siente liberada.
--Las tiré a la basura. Por desgracia no le puede quitar el apellido de ese hombre pero no quiero que mi hijo sepa de ese hombre.
--¿¡cómo haces algo así?¡ ese hombre..
Samantha no la deja seguir. Llorando y sin saber que Scott está escondido tras unas matas y lo escucha todo, abre al fin su corazón.
--¡ese miserable me violó¡
Scott observaba a Samantha escondido y se queda en shock por lo que está descubriendo. Elizabeth se siente culpable por no haber sabido entender el dolor de su amiga, por encerrarse en su felicidad mientras Samantha vivía un infierno.
--¿porque no me dijiste?
--porque fue mi culpa --llora Samantha con amargura-. Yo amo a Scott. Sé que te acostaste con él para vengarte de Kyle pero yo sentía rabia porque no te rechazó. Lo amaba pero no lo podía perdonar. Miles me convenció de fingir que hacíamos el amor. Sólo lo íbamos a fingir para hacer daño a Scott. Él nos vio desnudos y ahí acababa todo pero me violó. Yo no quería pero me violó.
Scott llora por la tragedia de su amada y por haberla juzgado. Samantha desahoga su dolor en brazos de su amiga.
--me acababa de bajar cuando me violó. No tengo dudas. Es su hijo y él me lo quería quitar y todo por una herencia de un padre que nunca me quiso y en mala hora apareció.
Samantha le cuenta todo lo del padre y le dice que usará ese dinero para crear una fundación para mujeres violadas para darles refugio y apoyo emocional y de lo que necesiten. Iban a abandonar el lugar. Scott sale de su escondite y la llama llorando. Al ver su dolor ella se da cuenta que lo sabe todo. Él corre hacia ella. Elizabeth los deja solos. Scott y Samantha se abrazan. Él la acaricia y le pide perdón.
--¡Qué tonto fui! ¡Me dejé llevar por los celos y no quise ver la realidad!
--¡Me sentía sucia!
Scott y Samantha unen sus cabezas.
-- Mi amor. Tú no tienes la culpa de nada. Miles ha hecho mucho daño. Ahora tenemos que olvidarlo todo y ser felices los tres, tú, nuestro hijo y yo. Steve no llevará el apellido de ese miserable. Tú y yo vamos a casarnos cuanto antes y yo adoptaré a Steve ¿quieres?
Ella llora de la felicidad.
-- ¡Por supuesto! ¡Quiero ser tu esposa cuanto antes quiero que Steve tenga el mejor padre: tú¡
Y sellan su compromiso con un apasionado beso de amor
.
Al cabo de un rato, Kyle sale desnudo de la ducha. Se seca con una toalla. Se sobresalta al ver a Scott que lo mira fijamente.
--¿qué te pasa?
Scott le señala el sofá.
--ven, tengo algo que contarte.
--espera que me visto.
--no puede esperar.
El desnudo Kyle se sienta en el sofá risueño. Scott se sienta a su lado.
--Tengo que contarte una historia, es muy loca pero así son ellas.
Y le habla de esa Elizabeth que se enamoró de su macizo al que veía como algo inalcanzable, de la lotería, de la cirugía, de ese vibrador que se llevó esa primera vez que él tanto ansiaba. A Kyle se le borra la sonrisa del rostro. Está muy impresionado por el relato.
--Por ti cambió. Se transformó en quien es por ti. Samantha le dijo que te reirías de ella siendo virgen, que la amarías más si creías que era una devora hombres. Ya sabes cómo es de loca. Y Elizabeth era inocente. Ella sólo quería amarte y que la amaras pero no sabía cómo hacerlo y siguió los locos consejos de Samantha. Elizabeth lo hizo todo por amor a ti. Fuiste el primero, la desvirgó un consolador. Ella creía que así la amarías. La trataste como una prostituta y una vez más por ti se convirtió en otra persona. En la prostituta que decías que era.
Kyle escucha lleno de dolor y con los ojos llenos de lágrimas.
Elizabeth está en su apartamento. Llora mirando a la calle y pensando en Kyle. Esta muy ensimismada y no oye la puerta. Kyle suspira enamorado. Se acerca sigilosamente y la abraza por la espalda. La besa en el cuello y ella se derrite. Él sabe que es suya y de nadie más.
--perdóname, te amo. Gracias por amarte tanto. Nadie me amo como tú.
Elizabeth lo mira enamorada. No puede creer que Kyle le esté diciendo estas cosas. Para sorpresa de ella, Kyle se arrodilla. Toma su mano. La mira con todo el amor que tiene para ella y dice:
--Elizabeth Maxwell ¿te quieres casar conmigo?
Ella llora de felicidad haciendo que sí con la cabeza. En un susurro y con la voz rota por la emoción dice:
--si.
Él se levanta. Se funden en un abrazo. Ella lo acaricia y lo besa sin poder dar crédito a lo que ocurre. No puede creer que sea verdad, que su sueño se haya cumplido. No es capaz de hablar por la emoción. Su rostro lleno de lágrimas pero de felicidad. Kyle se muestra muy sonriente y emocionado por el gran amor que esa chica le tiene. Acaricia esa lágrimas con mucha ternura. Están felices y se besan y ya no callan sus sentimientos. Se dicen una y otra vez lo mucho que se aman.
Año 2019...
Todo está lujosamente decorado para una boda a lo grande. El salón de un hotel de lujo. Todo decorado con miles y miles de luces. Cientos de invitados. Suena la música y entran los novios felices y sonrientes tomados de la mano. Son Steve (el hijo de Samantha) y Sam (el hijo de Dani). Caminan hacia el altar juntos y tomados de la mano. Muy sonrientes. Muy felices. Sam de blanco. Steve de negro. El amor se respira en sus rostros. Están cumpliendo el sueño de sus vidas. Se prometen amor eterno antes sus seres queridos. Tras el intercambio de votos y anillos se funden en su primer beso como matrimonio y abandonan el recinto muy abrazados, sonrientes, enamorados y felices ante los aplausos de sus familias y amigos . Todos celebran el amor. Todos están felices. Samantha y Scott son un matrimonio unido y feliz que se emociona al ver a su hijo tan feliz. Samantha no puede contener las lágrimas. Scott la mira enamorado. Con ellos están sus dos hijas. Una de ellas está apunto de hacerles abuelos por primera vez. Dani aplaude feliz y orgulloso por ese hijo que ha luchado por su amor y ahora disfruta de la felicidad. Es un hombre solo. Melancólico. No le ha faltado el sexo pero nunca ha tenido amor. Y le pesa. Y más viendo los felices que son sus amigos. Su hijo con su marido. No puede evitar sentir envidia. Le pesa su soledad. Elizabeth y Kyle viven en una eterna luz de miel. Siempre tomados de la mano y cada día más enamorados. Han formado una hermosa familia con cuatro niñas negras que han adoptado y que los están llenando de nietos que son su adoración. Durante el baile Elizabeth y Kyle bailan amarraditos como novios. Hay mucha complicidad entre ellos. Se besan. Ella lo mira muy enamorada.
--te amo tanto.
Él le guiña el ojo seductor.
--no entiendo como me aguantas después de casi treinta años juntos.
--porque eres mi sueño. Y me has hecho la mujer más feliz del mundo. Gracias por estar conmigo. Por darme la mayor dicha que puede tener una persona, estar a tu lado.
Kyle se emociona porque después de toda una vida juntos ella lo siga venerando de esa manera.
--gracias a ti por amarte de esa manera incondicional. Por apoyarme en las buenas y en las malas. Sin una mujer como tú a mi lado me hubiera hundido. Gracias por no dejarme a pesar que por mi culpa nunca pudiste ser madre.
--ya no vuelvas con eso. No me ha hecho falta nada más y me has dado cuatro hijas maravillosas. Tenemos una hermosa familia que no la cambiaría por nada del mundo y lo más importante. Nos tenemos el uno al otro.
--para siempre, mi amor --Kyle.
--para siempre. Te amo tanto --Elizabeth.
--y yo a ti.
Aferrados el uno al otro con pasión y con amor se besan ardientemente.
Fin
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