jueves, 22 de octubre de 2020

Capítulo 32

  







Kyle  se ha tumbado en la cama que compartía con Elizabeth. Llora.

--¡¡la amo, maldita sea¡¡la amo¡

Mike, que camina con dificultad,  entra conmovido:

--si le hubieras dicho esto antes muchas cosas no habrían pasado.

Kyle se levanta y seca sus lágrimas. Mira a su padre con rencor:

-- ¡¡te has revolcado con mi novia¡¡ ¡eres un cabrón¡ ¡Soy tu hijo ¿cómo me haces una cosa así?

Y Kyle no se ha dado cuenta que por primera  vez se ha referido a Elizabeth como su novia. Mike trata de acariciar a su hijo, a pesar que el está furioso, Mike lo trata con cariño. Le duele su sufrimiento:

--tú me dijiste que ella no te importaba, me dejé llevar.

Kyle tira su ropa del armario:

--¡tranquilo,  que te puedes quedar con ella... para tirártela hasta que te deje por otro¡

Mike trata de calmar la furia de su hijo:

--¡¡ella te ama a ti¡

Kyle se ríe con amargura:

--¡¡bonita forma de amarme revolcándose con toda mi familia¡

--tú la ofendiste, ella se arrepintió.

--¡¡si claro, porqué yo llegué¡¡ --dice herido.

--¿crees que si ella se hubiera querido acostar conmigo yo la defendería ante ti?

Kyle está enloquecido por los celos.

--¡¡estaba desnuda en tus brazos,  no me contaron¡¡¡yo lo vi¡

--¡¡vistes a una mujer despechada, que se quería vengar de ti¡

--¡¡pues a mí no me interesa una mujer que a la más mínima se mete en la cama del primer hombre que encuentra¡

--¡¡pero no pasó nada¡

--¡¡a lo mejor no iban a hacer el amor¡¡ ¡¡¿pero crees que lo que pasó entre ella y tú es lo normal entre un padre y su nuera?

--Se suponía que no había compromiso entre tú y ella. Si la amas, puedes olvidar.

Kyle habla con amargura:

--¿Olvidar que se acostó con Dani, con Miles, con Scott, con su padre, con mi hermano,  contigo? Lo siento pero no tengo tanta capacidad para perdonar.

Kyle tiene medio hecho su maleta:

--¿vas a renunciar a la que puede ser la mujer de tu vida?

--para vivir amargado con ella prefiero vivir solo ... almenos no seré un cornudo.

Kyle ya se va con su maleta. Mike trata de impedirlo:

--almenos espera que amanezca,  hablen tranquilamente. Date una oportunidad¿No has sido feliz teniendo una mujer que se desvivía contigo?

Kyle llora recordando los momentos felices:

--sí pero me dolía su pasado y ahora su presente es demasiado duro. Jamás podré olvidar que la vi en tus brazos. Una cosa es saberlo. Me dolía que había sido tuya pero verlo... No. No puedo olvidar eso.

Mike pone sus manos en los hombros de su hijo:

--¿dónde vas a ir? 

--eso no es tu asunto.

--espérate. Voy contigo. Vamos a mi casa.

--no. No te quiero arruinar la fiesta. Ahora esta cama es tuya.

El dolor de Kyle es inmenso aunque se traga sus lágrimas





El teléfono irrumpe en casa de los amigos que duermen. Es Scott, en calzoncillos, el que toma la llamada.

--¡¡¿ya nació?¡

El chico está alterado. Corre a despertar a Dani que se hace el remolón.

--ya, no me molestes.

Scott zarandea a su amigo.

--¡es de Caracas. Es Maria¡ ¡eres papá¡

Scott habla emocionado. Dani se despierta de golpe y corre desnudo a tomar la llamada. Se le saltan las lágrimas al escuchar llorar a un  bebé. Está muy emocionado. 

--¡mi hijo, es mi hijo¡

Scott está detrás de su desnudo amigo también emocionado. Por detrás, le pone la mano en los hombros. María le cuenta como ha ido todo, que ella y el bebé se encuentran bien. Que le mandará fotos.  Dani escucha llorar  a su hijo conmocionado. 

--sólo tengo una palabra... gracias... gracias por darme este regalito...

Maria está feliz por ser madre y porque Dani se muestra ilusionado y le promete que irá a conocer a su hijo.

--¿cómo se llamará? --pregunta el feliz padre.

--Sam. Se llama  Sam.

Dani esta muy emocionado. Él y Scott se funden en un fraternal abrazo




A la mañana siguiente, Samantha está en la habitación de un hospital con su hijo recién nacido en brazos. Miles está con ella.

--¡no sé porque no me avisaste que ya parías¡¡eso de mantenerme al margen de la vida de mi hijo se acabó. Vamos a pedir hora para casarnos ya y prepararnos para recibir la herencia y quiero que inicies los trámites. Quiero que mi hijo lleve el apellido Carrington¡ Miles Colby Carrington.

El hombre no ha mirado al pequeño ni por curiosidad. Es sólo una herramienta para hacerse con la fortuna del difunto Carrington.

Samantha no lo escucha, sólo mira a su hijo. Busca cualquier parecido con el hombre y es que le da horror que el niño se parezca a su padre.

Samantha para sí:

-- ¡Que no haya heredado nada del desgraciado de Miles, que sea un niño sano y normal¡

Samantha está muy angustiada. Tener a Miles a su lado reclamando sus derechos de padre no hace más atormentarla recordando su unión forzada. Miles quiere ver a su hijo pero ella no se lo permite. 

--¡sólo quería ver a mi machito ¡¡que bueno que me diste un hombrecito y no una hembra que sería  gorda y golfa como la madre. Espero que junior  se parezca a mi¡

Samantha con odio dice

-- ¡¡se llama Steve y no quiero que estés cerca de mi hijo¡¡no quiero que se parezca a ti¡

-- ¿¡y que prefieres, que sea un gordo asqueroso como tú? Ahora estás muy linda y yo disfruté mucho en la cama contigo y yo sé que a ti te gusto. Disfrutaste de lo lindo engendrando a tu bastardo.

Samantha se horroriza al recordarlo: 

--¡¡calla, calla¡¡no me lo recuerdes... me violaste¡

-- ¡Nadie te va a creer eso. La culpa la tienes tú por regalada. Te recuerdo la bien que la pasamos cuando eras una gorda, así que ahora no te vas a dar el lujo de rechazarme. Voy a registrar a junior como hijo mío te guste o no. No me obligues a tener que demandaré y contar a un tribunal que la madre de mi hijo es puta y un mal ejemplo para ese bebé. Te lo quitaré y lo abandonaré cuando esa herencia sea mía¡

Samantha protege al pequeño con sus brazos.

--Steve es mi hijo y no le harás daño.

--¡a la que te den el alta vamos al registro después tú y yo nos vamos a casar y vas a aceptar la herencia de nuestro hijo¡¡

Samantha llora atormentada:

-- ¡no, no... déjame en paz¡¡reclamaré la herencia y te la daré pero no quiero que mi hijo se llame como tú ni que tú estés cerca de nosotros¡

Él lo mira amenazante:

--¡yo no tengo la culpa que te acuestes con todo el mundo. Ahora te aguantas. Yo me iré con todo el dinero pero quiero papeles, no me quiero arriesgar a que te rías de mi, además quiero vivir la luna de miel... ya verás que bien la pasamos¡

Samantha llora desesperada.

--¡¡yo nunca he estado con otro hombre después de la cochinada que me hiciste¡

Miles la mira con cara de degenerado:

--¡¡pues ya verás como lo disfrutas¡¡nuestra noche de bodas va a ser inolvidable¡¡

Él la acaricia  y ella siente asco y horror:

--¡no, no¡¡no me vas a volver a tocar¡

--¡te voy a tocar siempre que a mi se me pegue la gana,  seré yo y no tú el que decida cuando hacemos el amor o no ¡¡así que ya sabes como son las cosas... si no quieres perder de vista a tu hijo tendrás que hacer todo lo que yo te diga¡

Samantha está horrorizada, abraza muy fuerte a su hijo para protegerlo de la maldad del hombre. Elizabeth entra en ese momento. Se sorprende al ver a Miles. Siempre supo que ese pequeño era de uno de los amigos pero que ni la misma Samantha sabía de cual y por eso nunca preguntó.

Miles da un  beso en la mejilla a Elizabeth.

--hola cuñadita... ¿has venido a conocer a mi hijo, a tu sobrinito?

Elizabeth mira a su amiga sorprendida. Intentando averiguar qué está pasando. Samantha sólo mira a su hijo. Se mantiene ajena a la conversación entre Miles y Elizabeth.

-- Ya lo he conocido ¡he sido yo la que he estado en la sala de partos... Cosa que deberías haber hecho tú si eres el padre¡

Miles pone su mejor sonrisa.

-- ¡perdona pero fue tu amiga la que no me avisó¡

--¿y supongo que no la vas a dejar sola con el niño, que le vas a dar tu apellido?

Samantha reacciona: 

--¡¡no, no quiero¡

Elizabeth acaricia a su amiga.

--piensa en tu hijo... no debe crecer sin su padre. Además Miles tiene sus derechos y sus obligaciones. Puedes rechazarlo como hombre pero no debes alejarlo de su hijo. Steve no tiene la culpa de las broncas de sus padres. Y todo niño merece un papá y una mamá.

Samantha siente asco de que ese hombre sea el padre de su hijo pero también siente asco de ella misma. Se siente culpable. Siente que la violación fue culpa de ella y por eso y por miedo a lo que haga Miles calla.

Miles mira con cinismo a Samantha, Divertido Miles besa en la mejilla a la joven y dice:

--Yo quiero mucho a mi hijo, Miles Junior llevará mi apellido, claro que sí y yo me quiero casar con Samantha pero es ella la que aún no se ha decidido... pero ya está casi decidido. ¿verdad, mi amor?

Samantha no dice que sí pero tampoco que no, siente asco y mira a su hijito para soportar la presencia de Miles. Samantha tiene miedo que Miles le haga algo a su hijo ya que lo ve capaz de eso y mucho más.








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Capítulo 33 y último

  Al día siguiente del parto, Samantha pide al médico que le den el alta. Se quiere ir lejos con su hijo. El médico se sorprende. --creí que...